El diseño de interiores lo dictaron materiales que transmiten fuerza y sutileza como el mármol, el granito, la madera, el latón y el cristal cortado de los candiles . Todo el interior tiene un mobiliario que evoca distinción y elegancia en un amplio espacio que hace sentir al visitante como un verdadero rey. La propiedad se ve bañada de la luz y la blancura que destaca de los materiales y accesorios que evocan el color tornasol de las perlas más exóticas. Enfocada en la exclusividad, el hedonismo y la sensualidad la Mansión incorpora a la firma Desire un punto de encuentro entre la opulencia y la concupiscencia para parejas que buscan disfrutar un estilo de vida fuera de tabús.

Las ocho suites se dividen en tres pisos, tres de ellas a nivel del suelo con acceso directo a la piscina del residencial. Cada una tiene su propia terraza con un daybed, un jacuzzi doble, una mesa para desayunar y hasta columpios, con un estilo propio que la hace única. Dos suites se ubican en el piso medio y dos Royal Suites en el último nivel, con un living adosado, un bar, una zona de relax y balcones con vista a la piscina, todas con una cama king size, a excepción de la Passion Suite que tiene una cama de 3.5m de ancho.

El recibidor y lounge de las habitaciones tiene una doble altura con muebles en tonos azules, dorados, grises, espejos con marcos y molduras en los techos. La carpintería y los candiles atraen las miradas y reflejan el lujo despertando las fantasías de los huéspedes materializando sus sueños. El hotel cuenta con elevador, cocina, roperías y bodegas para los servicios a los huéspedes así como una cocina para cenas exclusivas, maridajes y catas.

La propiedad cuenta también con áreas comunes para compartir e interactuar con otras parejas aventureras como un playroom siendo el lugar más privado y secreto, del cual no hablaremos, solo diremos que es un espacio destinado para el encuentro de quienes se atreven a ir más allá del placer.

Al exterior y como la entrada de la realeza, un puente conecta el lobby con el solárium que funciona como el centro energético del hotel, en donde los encuentros alrededor de la piscina y el bar son el lugar perfecto para disfrutar bajo el sol. Con sus 215m2 la piscina se ve tapizada con mosaicos grises, blancos y una elegante cenefa negra, al fondo esta el wet bar que integra además una mesa forjada para invitar a la reunión de sus huéspedes.

Ya sea que vengan a descansar como la realeza o a perderse en el éxtasis del placer; una cosa es segura, Desire Mansion excederá sus expectativas.